Cantar no es adorar, interpretar musica no es adoración, la adoracion es la llave de la presencia de Dios. Y adorar es rendicion completa aquel que lo ha dado todo por nosotros. Adorar es entrar en el mismo corazón de Dios y permanecer en El, es considerar, admirar,contemplar la hermosura del creador. Es permanecer y no tener prisa por marchar. El verdadero adorador está a solas con Dios, no existe nadie mas alrededor, aún cuando pueda estar rodeado de miles de personas. El que adora se desprende de toda carga, es tomado por el Espiritu Santo y trasladado al trono de su gracia. En la adoracion se abre el cielo, se siente la presencia angelical, te sientes sucio, no eres digno y tu carne y tu alma se rompe en mil pedazos, tus ojos se llenan de lagrimas, y tu boca solo puede expresar: santo tu eres santo. En la adoración, la gloria de Dios te sumerge en su plenitud, y eres llevado a lugares que nunca podras expresar con tus labios. Andas a solas con Jesús, paseas con El, sientes el aroma de mil flores, y vuelas como un aguila surcando el cielo. Contemplas las mas resplandecientes estrellas, y alcanzas a ver la eternidad de Dios.
Para llegar a ser un adorador, primero tienes que rendirte a Jesucristo, y conocerlo muy intimamente, has de estar locamente enamorado de El y has de recibir la uncion de un adorador.
La adoracion no nace en el culto, se forja en la intimidad de cada momento, es un constante vivir cerca de Jesús.
En la adoracion todo es suyo, todo le pertenece, no puede existir nadie más que El.
Muy pocos hombres y mujeres tienen la verdadera unción de adoración. Es unica, exclusiva, y destinada solo vidas tomadas por su gracia.
La iglesia de Samaria en Terrassa, Barcelona, tiene algo muy especial y es la adoracion salida del corazón de un hombre que ama profundamente a Jesucristo: su Apostol José Garcia, Pepe.
Dios ha depositado en su vida llaves tremendas para abrir el cielo, su ministerio ha cambiado el concepto de la alabanza tradicional, y ha levantado el corazon de muchos creyentes hacia una nueva dimension de gloria.
La unción que desprende su amor y entrega a Jesucristo, hace que toda la iglesia sea trasladada en las reuniones al mismo trono de Dios.
Llegar a entender, y sumergirse en la verdadera adoración es la base para amar, y servir a Cristo, no sirve de mucho, conocer todos los misterios de las escrituras y estar vacio de su gloria, que Dios nos de entendimiento, y que podamos seguir creciendo en adoración.
Luis M. Quiros.
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