A veces pensamos que eres tu, mi Dios, quien tiene que hacerlo todo, y cuando las cosas no suceden como deseamos, apartamos la mirada de ti como si tu fueras el culpable, mucha gente se enfada, e incluso se aleja de tu camino por este pensar, Pero tu y yo sabemos que las cosas no son así. Tu trabajas juntamente conmigo, somos socios en una misión poderosa: Alcanzar esta humanidad para tu reino, Consolamos con tu consuelo, amamos con tu amor, perdonamos con tu perdón, oramos y tu nos das la fuerza y la sabiduría para hacer la obra, sabiendo que no somos nosotros, eres tu. y sin ti nada podemos hacer. Por eso Siempre nosotros tenemos que hacer una parte, y tu haras lo siguiente. Somos colaboradores de Cristo. Te Amo Jesús.
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