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sábado, 20 de octubre de 2012

Palabra viva. Galatas.2.11

Pero cuando Pedro vino a Antioquia, le resistí cara a cara, porque era de condenar.
Pareciese que en este tiempo que corre, que todo esta permitido y  tenemos que dejar vivir y respetarlo todo. Pero la biblia no  dice esto. En la carta. Del apóstol Pablo a Timoteo, nos dice que en los postreros tiempos, vendrán días,tiempos peligrosos...
Nosotros los creyentes no podemos callarnos delante de las injusticias.  Cuando callamos delante del pecado que Dios aborrece, nos hacemos participe con el pecador. Jesús condena la maldad de los religiosos, su hipocresía,su arrogancia. En el libro de Romanos, también nos dice la escritura que cuando consentimos por nuestro silencio el pecado, nos estamos conformando a este siglo, y haciéndonos parte, juntamente con los pecadores..
Cesarea Maritima

El apóstol Pedro actuaba con doblez delante de los judíos

 Pero Pablo entendió que esa actitud era digna de ser reprobada. El no tuvo temor de reprender a Pedro, y aunque el era la cabeza establecida por Jesús, Pablo no se arrugo ni dejo pasar por alto este hecho. Cierto es que dice la escritura, que aquellos que declaran la verdad serán aborrecidos. Pero eso es lo normal en la vida cristiana, Jesús dijo...
Por mi causa. Seréis perseguidos por los hombres, aborrecidos, e incluso muertos por decir la verdad y ser hijos de luz. Dios nos ha puesto como atalayas para declarar lo que no es recto delante de Dios. No podemos ser perros mudos, que se callan y no ladran cuando ven al ladrón entrar en la casa. Cuando esto ocurre, las conciencias se endurecen y la maldad empieza a ganar terreno.
Al que pecare... reprende lo delante de todos para que los demás teman.
La gracia no es una excusa para hacer lo que nos viene en gana. La gracia es aun mas exigente que la ley, nos recuerda que Cristo murió por mi sin merecerlo,  y este amor nos doblega para hacer lo que conviene. La verdad de Dios ha de estar presente en nuestra vida, pues El ama la verdad en lo intimo.